Desde inicios de año, abrieron las escuelas abiertas de verano que llegaron a dos cárceles de la zona oeste. La iniciativa del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB) se realiza en las unidades penitenciarias 43 y 59, ubicadas en González Catán y Merlo respectivamente.
En total cerca de 100 internos decidieron continuar sus estudios durante este verano. La propuesta se extenderá hasta el próximo miércoles 31 de enero e incluye diferentes actividades recreativas y pedagógicas para los alumnos que se encuentran en contexto de encierro.
Con esta propuesta se busca favorecer la inclusión social, la integración y la promoción de la actividad física, artística, cultural y recreativa. De esta manera, se permite la continuidad del proceso de enseñanza y aprendizaje.
Dos cárceles del Oeste participan del programa
Docentes de la unidad carcelaria de La Matanza señalaron que se brindan clases de computación, idiomas y literatura, entre otras asignaturas. Las mismas se dictan en los cuatro salones del sector colegial y el centro de estudiantes interno.
La propuesta contó con una gran cantidad de participantes en la provincia, que desean continuar su proceso formativo mientras se encuentran privados de su libertad.
“Todos tienen ganas de estudiar, y que tengan la materia en verano hace que sigan con el uso de las computadoras y no pierdan práctica”, aseguró el profesor de informática Juan Scigliano.